¿Cuántas veces no has escuchado la expresión “mentalidad
pobre”? Muchas probablemente, pero acaso ¿Te has
detenido a pensar qué significa realmente tener una mentalidad pobre? Es una analogía
para explicar la manera en que la gente ve el dinero y cómo actúan ante la vida
en torno a su situación económica.
Hagamos
el siguiente ejercicio; cuando piensas en tus logros y metas financieras ¿Cómo
piensas que podrías alcanzarlas? ¿Trabajando duro para lograrlo o a través de
un milagro, postergando las cosas, y deseando
ganarte la lotería? Dependiendo de cómo pienses actúas, por ende tus
pensamientos determinan en gran medida hacia dónde vas.
Cómo
sabemos que es un tema que te interesa, el día de hoy te traemos algunas falsas
creencias capaces de mantenerte económicamente estancado. ¡Lee y conócelas! Así
lograrás identificar estos errores y lo más importante, evitarlos.
-Seré
rico en un futuro: Afronta la realidad, no eres un niño, deja de pensar en un
futuro lejano cada vez que de dinero se trata, el tiempo correcto es el
presente, si quieres lograr tus metas financieras debes trabajar por ellas.
-Invertiré
cuando sea seguro para evitar pérdidas: Si quieres alcanzar la riqueza o cierta
estabilidad económica en tú vida debes esforzarte y ponerte en marcha en todo
momento sin temor a fracasar, ten en cuenta que tendrás que arriesgarte dejando
a un lado los pensamientos negativos.
-Deudas,
si las dejo pasar se irán: No creas que por dejar de pagarlas estarán saldadas
mágicamente, de hecho si haces esto ante una entidad financiera ganarás mala
reputación y dañarás tu historial para futuros créditos y/o préstamos.
-Ahorraré
cuando tenga suficiente capital y edad: No te pongas límites de edad ni tiempo
innecesarios, hay empresarios exitosos que comenzaron dese pequeños no debes
esperar tener más de 30 años mientras más ahorres cuánto antes mayor será tu
posibilidad para invertir y por ende tu capacidad adquisitiva y estabilidad.
-No
estoy preparado para emprender y ser exitoso económicamente: Eres el único
responsable de las decisiones y rumbos que tome tú vida, por ende, eso te da
las suficientes razones para ser garante del éxito o fracaso.
Ganar
más dinero a veces no es necesariamente la solución a tus problemas económicos,
muchas veces el problema viene en cómo percibes la vida y la manera de
afrontarla.
Piensa
algo, deséalo, propóntelo, comprométete contigo mismo y trabaja para lograrlo. Recuerda,
no hay más límites que los que te tú mismo te creas.
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